Busca la paz en casa...

Todas las familias tienen desacuerdos, algunas veces el conflicto es tan grave que hace mucho daño, en otras familias los desacuerdos son luchas diarias por asuntos menores.

Se vuelve normal luchar y discutir y no debería esto sorprendernos, ya que las familias están formadas con individuos con sus propias personalidades, deseos, necesidades y preocupaciones.

Pero nosotros sabemos que vivir en un estado de constante conflicto produce gran stress en el matrimonio y en la familia.

El rey David entendió el dolor de una familia dividida por el conflicto, su hijo Absalón se negó a hacer las paces con él, si un enemigo me hubiera afrentado yo lo habría soportado, pero fuiste tú dice el salmista en Salmos 55:12-13

Nosotros somos llamados a ser pacificadores, en nuestra familia, iglesia y comunidad esto significa usar nuestra influencia para contribuir en la paz.

La paz verdadera y duradera fluye de la honestidad en las relaciones, incluso cuando enfrentamos fuertes y dolorosas diferencias.

Deberíamos dar pasos para que la familia avance en pos de la paz, podría ser un acto de bondad o humildad, en lugar de venganza.

Si has sufrido un daño en casa, entregalo a Dios sabiendo que el juzga con justicia y por encima de todo se paciente...
Belkys